En invierno abundan las enfermedades del aparato respiratorio: gripe, resfriado, faringitis, etc. Son enfermedades infecciosas, es decir, causadas por virus o bacterias. Y son las causantes de un tercio de todas las consultas médicas en España. La pregunta que nos hacemos es por qué son más frecuentes cuando llega el frío.
Recuerdo a mi abuela Rita Lorén Gómez diciéndome que los virus entran por los pies, haciendo referencia a que ir descalzo (pasar frío) hace que enfermes, ¿es eso cierto?
La verdad es que no enfermamos por el frío sino por la presencia de los agentes patógenos antes mencionados. Sin embargo, la frecuencia de estas dolencias aumenta en invierno.
Revisando la literatura encontramos algunas respuestas y datos interesantes.
- Ronald Eccles, director del Common Gold Centre de la Universidad de Cardiff, asegura que encontrarse frío y mojado también podría comportar un estrechamiento de los vasos sanguíneos de la nariz como medio de conservación del calor, cerrando así el paso de sangre cálida que suministra glóbulos blancos para combatir las infecciones. Hay muchas personas que transportan los gérmenes del resfriado, pero el enfriamiento puede hacer que sea más difícil combatir los efectos.
- En un experimento, noventa voluntarios sumergieron sus pies en agua helada durante 20 minutos. Durante los cinco días siguientes, el grupo que había sumergido los pies en agua helada tuvo el doble de resfriados que un grupo control de 90 voluntarios cuyos pies no habían sido enfriados. Así pues, no bastaría ni con tener frío o con estar mojado, hay que evitar las dos cosas simultáneamente
Diversos estudios han demostrado que las personas sometidas al frío no son más propensas a enfermarse que las expuestas al calor. La verdadera razón por la que tendemos a enfermarnos más frecuentemente durante el invierno yace en el hecho de que pasamos más tiempo en espacios interiores, en general saturados de gente –y de gérmenes...
Como vemos, entre la comunidad científica no hay acuerdo entre si el frío provoca que enfermemos, o no. Con lo que nos quedaremos con las siguientes ideas:
- Enfermamos por la presencia de patógenos: virus, bacterias, etc.
- Nos cubriremos la boca y nariz al toser y estornudar para evitar el contagio.
- Evitaremos pasar frío durante largos periodos, especialmente si vamos mojados.
- La cabeza también se abriga en invierno. Es la parte más expuesta del cuerpo y por lo tanto pierde bastante calor.
En caso de duda o enfermedad, visitaremos la farmacia De Jaime, que seguro que nos ayudan. ;)
Desde la Farmacia Online De Jaime de Valencia, esperamos les haya resultado interesante este breve post.
Pablo de Jaime Ruiz
Biólogo y profesor de ciencias naturales